Absceso generalmente duro y lleno de pus, que se forma en cualquiera de los párpados. Lo ocasiona la oclusión de las glándulas que se encuentran en el espesor de los párpados. Aparece un nódulo prominente en la piel del párpado o puede hacerse prominente hacia el ojo.

En su periodo de formación causa dolor, inflamación, enrojecimiento y el aumento de volumen que lo va a hacer aparente. Ya bien formado, muchas veces desaparecen las molestias y sólo persiste el nódulo.

Se trata con medicamentos y medidas físicas, como fomentos calientes, con lo que se espera su curación y desaparición pero, a veces, cuando esto no funciona, hay que drenarlo quirúrgicamente.